Las lagañas en los ojos son una secreción natural que se acumula, sobre todo al despertar, formada por mucosidad, células muertas y pequeñas partículas. Aunque tener unas pocas es normal y ayuda a proteger y limpiar los ojos, el exceso o cambios en su color pueden indicar problemas de salud ocular. La Dra. Raquel Medina, especialista en oftalmología en Salamanca, explica todo lo que necesitas saber sobre las lagañas, sus causas, tipos y cómo cuidarlas correctamente.
Qué son las lagañas en los ojos y por qué aparecen
Las lagañas son una mezcla de lágrimas, polvo, mucosidad y células epiteliales desprendidas que se acumulan durante el sueño. Su función principal es proteger los ojos, atrapando partículas que podrían irritar la córnea y manteniendo los ojos lubricados.
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Lagañas en el ojo: forman una película fina alrededor de los párpados y las pestañas.
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Lagañas en las pestañas: suelen observarse al despertar y se eliminan fácilmente con limpieza suave.
En la mayoría de los casos, las lagañas blancas son normales, especialmente cuando aparecen en el lagrimal o en las pestañas al despertar. Sin embargo, un ojo con legañas y rojo puede ser señal de irritación, infección o alergia.
Tipos y características de las lagañas

Dependiendo de su cantidad, color y consistencia, podemos diferenciar varios tipos:
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Lagañas blancas en los ojos: comunes al despertar, especialmente en el lagrimal.
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Lagañas blancas en el lagrimal: acumulación localizada que se elimina fácilmente con higiene diaria.
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Ojo con legañas y rojo / ojo rojo con legañas: puede indicar irritación, alergia o infección.
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Mucha lagañas en los ojos / ojos con muchas legañas: generalmente asociadas a conjuntivitis o sequedad ocular.
Reconocer el tipo de secreción ocular ayuda a determinar si es un fenómeno normal o requiere atención médica.
Causas frecuentes de ojos con lagañas
Las lagañas pueden aumentar o cambiar debido a varios factores:
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Fatiga ocular y uso prolongado de pantallas: disminuye la frecuencia de parpadeo y aumenta la sequedad.
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Conjuntivitis bacteriana o viral: provoca secreción amarillenta o verdosa y ojos rojos.
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Alergias: generan picazón y secreción acuosa o mucosa.
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Obstrucción de glándulas de Meibomio: altera la producción de lágrimas y aumenta la acumulación de legañas.
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Otros factores: polvo, contaminación, falta de higiene ocular o uso de cosméticos irritantes.
Síntomas asociados a ojos con legañas
Además de la presencia de legañas en los ojos, existen otros síntomas que pueden acompañarlas y que deben ser considerados:
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Ojo rojo y con legañas: indica irritación o posible infección.
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Picazón o ardor en los ojos: común en alergias y sequedad ocular.
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Sensación de arenilla: puede acompañar a los ojos legañosos y causar molestias al parpadear.
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Inflamación de párpados: suele aparecer junto a secreción abundante o infecciones.
Detectar estos signos a tiempo permite acudir al oftalmólogo y evitar complicaciones.
Prevención y cuidados de los ojos legañosos
Mantener los ojos limpios y saludables ayuda a reducir la aparición excesiva de legañas en los ojos:
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Higiene diaria: limpiar suavemente los párpados y las pestañas con gasas estériles o soluciones recomendadas por el oftalmólogo.
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Evitar frotarse los ojos: reduce el riesgo de irritación o infección.
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Uso de lágrimas artificiales: ayuda a mantener la córnea hidratada y disminuir la acumulación de legañas.
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Revisiones periódicas: consultar a la Dra. Raquel Medina si hay secreción abundante, ojos rojos, dolor o visión borrosa.
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Evitar irritantes: polvo, humo, cosméticos agresivos o contacto con personas con infección ocular.
Curiosidades sobre las legañas
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Las legañas blancas en los ojos son más comunes por la mañana porque la secreción se acumula mientras dormimos.
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No todas las secreciones indican enfermedad; algunas son resultado del proceso natural de limpieza de los ojos.
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El exceso de lagañas puede verse más en niños y personas con alergias estacionales.
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Mantener hábitos de higiene y limpieza ocular diaria ayuda a prevenir irritaciones y molestias.
Lagañas en los ojos: Conclusión
Las lagañas en los ojos son un fenómeno natural que ayuda a proteger y limpiar nuestros ojos, pero un exceso de secreción o cambios en su color pueden indicar problemas oculares que requieren atención profesional. Mantener una buena higiene ocular, descansar la vista y acudir a revisiones periódicas con la Dra. Raquel Medina garantiza una visión saludable y previene complicaciones.
Explora artículos, recomendaciones y novedades sobre tus ojos en el blog de la Dra. Raquel Medina, cirujana oftalmóloga en Salamanca, y mejora tu bienestar visual.
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